7 de febrero de 2020
#044 idea de la semana: silver economy, jóvenes a cualquier edad
Según un estudio del Eurostat, en el año 2060, 1 de cada 3 personas será mayor de 65 años. Un cambio demográfico que ya está aquí y que va a provocar profundos cambios en la sociedad, el estado del bienestar y la economía. Pero esta tendencia al envejecimiento de la población abre la puerta a nuevos negocios y oportunidades, lo que se conoce como silver economy. Un negocio que, según la Unión Europea, moverá el 31,5% de la economía. Y sólo es el principio.
Pero, ¿qué es la silver economy? Se trata de un nuevo nicho de mercado que afecta y se dirige a los ciudadanos y ciudadanas de mayor edad. Sin embargo, hablamos de una tercera edad que difiere del término tradicional, pues se trata de personas sénior con alto poder adquisitivo, saludables y con capacidad y ganas para hacer muchas actividades. Observando estos indicios, la tendencia apunta a la necesidad de ‘silverizar’ la economía y el marketing para replantearse las estrategias que hasta ahora han ido enfocadas a los millennials y al aspecto tradicional de la tercera edad. Una nueva visión y un mensaje, jóvenes a cualquier edad, que afectará a sectores como la salud, el ocio, las finanzas, el transporte o la tecnología, entre muchos otros.
Servicios personalizados y a medida
Así deben ser los productos y servicios que se ofrece a las personas en edad sénior, algo que ya tuvieron en cuenta empresas como AdventuresAbroad, que ofrecen packs de viaje personalizados y especiales para personas de la tercera edad, ya sea mediante excursiones de aventura u otro tipo de planes. Empresas y centros del cuidado del cuerpo y la salud también tienen diversos servicios personalizados para personas de la tercera edad, como los que ofrece Cenie.
Un sector que tendrá gran protagonismo en este aspecto será la tecnología, pues ofrece múltiples soluciones a problemas de movilidad, seguridad o salud. Desde exoesqueletos para ofrecer más movilidad como Innophys, abalorios con opciones gps o botones de pánico como ha desarrollado TrendHunter o múltiples accesorios de domótica, para facilitar la vida en casa de personas que puedan tener algunas complicaciones, como Koolnova. Importante borrar la idea de que tercera edad y tecnología son términos disociativos, pues las personas en edad sénior cada vez tienen un mayor conocimiento de la tecnología y su uso: tienen smartphone, tablets y usan las redes sociales.
Una generación con tiempo, activa e inquieta
Porque hablamos de personas con tiempo y, sobre todo, activas, con ganas de probar nuevas experiencias y de aprovechar su tiempo. Hay empresas que ofrecen servicios de acompañamiento, en lucha contra la soledad y el aislamiento social, como Men’s Sheds, un organismo de apoyo que ayuda a personas de la tercera edad a hacer diferentes labores de carpintería o metalurgia o Wooln, otra organización que tiene el mismo objetivo, elaborando gorros de lana zurcidos por personas de más de 65 años.
Y, en el nuevo paradigma donde las redes sociales son un pilar básico, ¿cómo no iban a tener espacio esta nueva tercera edad? También podemos encontrar influencers de más de 65 años como Lyn Slater o Helen Van Winkle, ambas especializadas en moda. Es más, la famosa cadena hotelera de Meliá ha comenzado a utilizar una influencer sénior, que se ha convertido en una de sus embajadoras, pues es un target también activo en redes sociales.
Entre las nuevas generaciones sénior encontramos una amplia amalgama de estilos de vida, desde aquellos que sufren síndrome de Peter Pan a los que ven la madurez como una oportunidad o una segunda juventud, la ocasión para viajar y vivir de vacaciones. Son personas con vitalidad y ganas de seguir aprendiendo y viviendo aventuras. El marketing debe adaptarse para buscar soluciones a las necesidades de un target con poder adquisitivo, dispuesto a consumir y fiel a las empresas que les gustan. Como diría mi abuela: viejos son los muebles, las personas se hacen sabias.
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