31 de diciembre de 2021
¿Por qué comemos uvas en Nochevieja? #042 historia de la semana
¿Por qué comemos uvas en Nochevieja? Según la tradición, comer doce uvas durante las campanadas nos conduce a un año de buena suerte y prosperidad. Pero el que muchos de nosotros no conocemos es de donde viene esta costumbre tan conocida.
Sí que es cierto que esta tradición con los años se ha ido extendiendo a muchos puntos del mapa, pero comer uvas al sonido de las campanadas tiene su origen en España, concretamente en Madrid. Se dice, que aparte de servir como forma de despedir el año, cada grano de uva también representa un deseo para cada uno de los meses del próximo año.
La uva de la suerte
Para saber cómo nace esta curiosa tradición tenemos que decir que existen diferentes explicaciones. Una de las teorías más aceptadas que acompañan esta costumbre se remonta hasta el año 1909. En aquel año hubo muy buena cosecha de uva y los productores decidieron dar más salida al producto vendiéndola como «uva de la suerte» en paquetes preparados de doce uvas, simbolizando los doce meses del año. Con el paso del tiempo, la tradición se fue puliendo. Hoy en día mucha gente dice que las uvas simbolizan la abundancia y cada vez que comemos una hay que pedir un deseo. En total, 12 deseos.
Aun así, los diarios del año 1882 ya recogían fragmentos de esta costumbre, con lo cual es probable que el excedente de uva del 1909 solo fuera un empujón más a una tradición que ya se gestaba. Por lo tanto, todo esto nos lleva a otra teoría, que nos dice que todo empezó en el 1882, época en la cual la clase burguesa solía beber champán y comer uvas durante la cena de la nochevieja. Como protesta, un grupo de madrileños decidieron ironizar esta tradición acudiendo a la Puerta del Sol para comer uvas acompañados del sonido de las campanadas de fondo. Esta acción de revuelta por la distinción de clases de cara a Navidad llevó a la gente a reunirse para comer uvas, como burla de los hábitos de la aristocracia.
Según las publicaciones de los medios de aquella época, la tradición provocó tanto interés que, en 1903, la uva ya se comía incluso en Tenerife. En cuestión de pocos años la costumbre se fue ampliando y repitiendo en toda España. Como curiosidad, hay que destacar que la prensa del 1907 se quejó que comer uva se hubiera arraigado tanto a la sociedad cuando inicialmente la clase más baja comía uva para burlarse de los más ricos, y se estaba perdiendo esta crítica.
¿Pero porque uva?
La uva es un fruto que tradicionalmente se ha asociado a la buena suerte, a la positividad e incluso a la espiritualidad, por lo cual colocar 12 uvas para comer era un símbolo de buena suerte en la nueva entrada de año. Además, se trataba de una fruta asequible de la cual a menudo había excedente en los cultivos.
En general, se puede decir que todos los países tienen sus tradiciones y sus costumbres para dar la bienvenida al nuevo año. Todas las sociedades han ido creando un conjunto de bases para despedir el año que acaba y buscar fortuna y buena suerte en el que entra. Con los años estas costumbres quedan, y el que inicialmente nace como una idea, acaba formando parte del imaginario colectivo. Ahora que ya lo sabemos, podemos aprovechar para pensar con tiempo los 12 deseos que queremos pedir y quedará esperar si este nuevo año 2022 nos sorprenderá.
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