Diseñar un conjunto de cajas de barquillos con la finalidad de provocar la compra de la colección completa.
Focalizándonos en el recipiente, diseñamos tres productos a partir de caras divertidas, jugando con la ventana para visualizar el producto del interior de cada una de las tres cajas: barquillos normales, de chocolate negro y de chocolate blanco. El resultado fue exponencialmente positivo.