27 de diciembre de 2018

#002 Idea de la semana: Este robot sólo quiere que lo quieran

En las últimas semanas hemos visto como dos de las propuestas pioneras de la robótica social, Jibo i Kuri, han quebrado. Incluso el interés en el robot social más ubicuo, Pepper, parece tambalearse. Quizás llegaron demasiado pronto, cuando las tecnologías para una interacción natural con las personas no estaban suficientemente resueltas. La expectativa se topó con la realidad.

Mientras tanto, los asistentes personales de Amazon, Google y otros, más prácticos y más asequibles, los han tomado los hogares. Pero, como humanos, buscamos interacciones humanizadas, no sólo útiles, y los robots sociales tendrán un papel. Nos llega ahora una nueva propuesta desde Japón: Lovot. Un robot que responde a como se le trata y que no hace otra cosa que esperar ser amado. No hace nada más, no hace nada mejor. Pero quizá no sea necesario. ¿O sí?